Creo que la frase original se refería a los reservados de La Posada.
Pero para lo que voy a contarte aquí, sirve igual.
Es más, hoy quiero usarla para hablarte de algo fundamental para tu abundancia empresarial:
El entorno.
El entorno es una de las principales palancas de cualquier emprendedor o empresario.
Y al igual que con las mentalidades, ese entorno puede ser de crecimiento o fijo.
¿Ves la diferencia?
Ok, te cuento.
Imagina que montas un negocio y tu entorno está formado por personas que quieren avanzar, que se centran en lo que pueden lograr, que se obsesionan con mejorar cada día.
Lo más normal es que tú actúes exactamente así.
Los seres humanos somos gregarios. Y a veces eso es bueno.
Pero también puede ser malo.
Imagina ahora que montas un negocio y tu entorno está lleno de personas con mentalidad de pobreza.
Gente que solo habla de los malos clientes que tienen o del infierno fiscal que supone operar en España.
Lo más probable es que tú termines pensando y actuando igual.
¿Te das cuenta de la diferencia?
Entorno de crecimiento vs. entorno fijo.
(Léete el libro de Carol Dweck sobre mentalidades, hazme caso).
Ok, ¿qué puedes hacer al respecto?
Mira, una de las principales tareas de cualquier emprendedor o empresario es cuidar muy bien su círculo cercano.
Muchas personas asisten a eventos de emprendedores, se apuntan a grupos de mastermind o forman parte de comunidades online.
Sobre todo aquellos que trabajan online y necesitan calor humano.
Calor de personas que entienden qué es lo que hacen todos los días frente a la pantalla del ordenador.
Y eso está muy bien.
Pero, al igual que no es buena idea tener pareja para no estar solo, no es útil meterte en cualquier grupo solo por estar acompañado.
Este fin de semana, en una terraza andorrana al sol, hablaba sobre esto con un grupo de empresarios cojonudos.
Empresarios que decidieron mudar su negocio y su vida a territorio no confiscatorio.
Personas que decidieron que si en su país de origen no valoran el tremendo aporte de sus negocios a la sociedad, había que cambiar de entorno.
Personas que no decidieron quedarse por apego, miedo o aceptación social.
Personas que votaron con los pies.
Y lo que quizás te sorprenda (esto es algo que poca gente sabe) es que Andorra tiene un entorno empresarial privilegiado.
Un entorno en el que las conversaciones giran en torno a cómo, cuándo y dónde conocer a más personas interesantes de las que aprender.
De cómo hacer crecer los negocios.
De cómo aportar más a nuestros clientes.
Y de cómo ganar más con todo eso.
Un entorno en el que el crecimiento es inevitable.
Entonces, ¿quiero decirte que te vayas a vivir a Andorra?
No, no te estoy diciendo eso.
Lo que quiero que veas es que tu entorno define mucho tu conversación mental.
Define lo que crees que eres capaz de conseguir.
Define tus expectativas. Aunque pienses que no, lo define.
Tu entorno define lo que vas a conseguir.
Por eso, te animo a que actives una de las principales palancas que tienes en tus manos para lograr la abundancia empresarial.
No te conformes con el entorno que te ha tocado en tu barrio o en el grupo de emprendedores en el que te mueves habitualmente.
Elige conscientemente de quién te quieres rodear a partir de ahora.
Deja de lado los prejuicios y sal ahí afuera con la ilusión de un niño y la valentía de un guerrero.
Elige un entorno de crecimiento y los resultados serán inevitables.
Lo que necesitas es un cambio de chip.
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